martes, 9 de octubre de 2012

Carrera popular 9 d'Octubre de Altea


“Mi carrera más clásica”. Pues sí, la Carrera Popular del 9 d'Octubre d'Altea es mi apuesta fija de todos los años desde que empecé a correr. Con mejores o peores resultados, más o menos sufrimiento, no he fallado a ninguna edición desde 2008, siendo la prueba en la que más veces he participado (5), y además, de manera consecutiva. Este año, además de no estar todo lo bien que me gustaría, venía de disputar dos días antes la Media Maratón de Alicante que había sido durísima, así que en esta ocasión iba a ser una trotadita suave para no forzar mucho. Además, iba a acompañar a mi hermano durante el recorrido, así que el plan era llevar un ritmo cómodo y constante todo el trayecto. Una hora antes ya estábamos en Altea Jose, El Guaje, mi hermano y yo, dispuestos a comernos el asfalto. Recogimos los dorsales, saludamos a los amigos y compañeros, nos hicimos las fotos de rigor y a calentar y a estirar un poco. Como siempre, muy buen ambiente en la línea de salida, con muchos corredores (pese a que este año, debido a la crisis nos ha tocado pagar la inscripción) y espectadores. La mañana iba a ser calurosa, ya que el sol ya empezaba a hacer acto de presencia. El recorrido el de las últimas ediciones: 8600 m., a una única vuelta, con trayecto por el paseo marítimo hasta El Albir, vuelta por el mismo paseo, subida hacia el centro del pueblo, rodeo por la parte alta y llegada a meta. Como siempre, lo más complicado las subidas que hay entre el Km5 y el km7. A las 10 en punto se dio, la salida, y comenzó el desfile de runners. Nuestra estrategia estaba más que clara, así que desde el principio, cogimos un ritmo cómodo y a disfrutar. Durante la zona del paseo marítimo íbamos a 5:05 m/km, y no paraba de adelantarnos gente. Nosotros a lo nuestro, ritmo constante. Cuando no te tomas una carrera con ánimo de disputarla al máximo te da tiempo para muchas cosas, como por ejemplo, no parar de hablar u observar el paisaje, el mar, la serra gelada, etc. que con el día soleado ofrecían unas vistas preciosas que en otras ocasiones ni me había parado a observar. Todo el recorrido del paseo marítimo, tanto en la ida como en la vuelta mantuvimos el ritmo cómodo (5 m/km), y ya poco a poco la carrera se estabilizaba y éramos nosotros los que empezábamos a adelantar a otros corredores (motivación extra). En el Km 5, como preludio del inicio de las cuestas, el avituallamiento para refrescarnos (bastante mal organizado, por cierto, ya que en él había un adulto y un niño, tratando de abastecer como podían a todos los corredores que íbamos pasando y que incluso tuvimos que ayudarles a abrir las cajas del agua porque no daban abasto). Bueno, refrigerados y a buen ritmo, nos lanzamos hacia arriba a por las cuestas: la primera larga y pronunciada, que si has llegado hasta allí dándolo todo, se puede atragantar. Con tranquilidad y algo de sufrimiento, poco a poco hasta arriba. Mi hermano ya empezaba a sudar goterones y a acusar el calor, pero ya estábamos terminando. Después de un tramo de subidas y bajadas suaves ya entrando de nuevo en Altea una gran multitud animando, en la cual estaba Pilar, Gema y mi pequeñín Nacho. Después de los saludos y los ánimos, segunda subida: un poco más corta, pero con un poco más de pendiente. Ésta ya picaba un poco más, pero al final, arriba con ella! Ya estaba casi todo el trabajo hecho. Ahora tocaba un largo descenso suave de 1 Km aproximadamente.  Mi hermano ya iba tocado, pero al ser bajada, tiré de él al máximo hasta sacarle la carbonilla. Durante todo la bajada aceleramos un poco el ritmo, y adelantamos a varios corredores (lo que da un plus extra de energía) hasta que nos reagrupamos con nuestros compañeros de viaje, Jose y El Guaje. Ahora ya, pasado el 8 sólo quedaba un breve llaneo por la zona del polideportivo para entrar de nuevo en el centro del municipio. Último giro, y al fondo ya la meta. Mi hermano ya va justísimo, pero le quedan fuerzas para un arreoncillo final y entrar en meta por debajo del tiempo que nos habíamos marcado como objetivo (45 m.). Últimos metros, y mi hermano me da las instrucciones que en su día le inculqué: Buena cara y sonrisa para la foto!!

Tiempo oficial: 44:51

Tiempo real: 44:39  (a 5:11 m/Km)

Puesto de llegada: 238  (380 entrados en meta)
 

Como es habitual, después de la meta, el típico avituallamiento y la bolsa del corredor (camiseta técnica, chocolatina y agua). Para mi esta carrera era más bien una pachanguilla (que no se interprete mal, no lo digo ni con desprecio ni fanfarronería: quiero decir que fui a correr suave y a disfrutar), después del palizón que me dí dos días antes en la media de Alicante. El principal objetivo era pasarlo bien y acompañar a mi hermano en su preparación a su 1ª Media Maratón. El tío ha bajado 8 m. la marca del año pasado. Así que, objetivo más que cumplido. El año que viene, volveremos!!  
 


 
 
                                     


 

 
Fotos de Calygat, Marivi y Juanan